Cuando el calendario da lugar a septiembre, los estudiantes de todas partes inauguran sus nuevos cuadernos en el primer día del regreso a clases. Para muchos niños, el nuevo año escolar viene acompañado de nervios, ansiedad y la sensación de un nuevo comienzo, pero investigaciones recientes de Gallup informan que, a medida que los estudiantes pasan quinto grado, el sentido de aventura y entusiasmo por la escuela disminuye año a año. El aprendizaje activo de los estudiantes, una pedagogía de la enseñanza que transforma las aulas tradicionales en entornos donde los estudiantes pueden desempeñar un papel activo en su experiencia de aprendizaje, muestra señales prometedoras como forma de reactivar el amor por el aprendizaje entre los estudiantes.
La Encuesta Gallup de estudiantes 2017, una encuesta de 24 preguntas que mide el nivel de participación, esperanza, aspiración emprendedora y conocimientos financieros/profesionales de los estudiantes de quinto a 12mo grado, detectó que menos de la mitad de los estudiantes están comprometidos en la escuela. Esta falta de compromiso está acompañada por una sensación de desánimo, ya que un quinto de los estudiantes afirmó sentirse desalentado, sin mentores que estimulen su desarrollo, objetivos futuros y esperanzas de tener un buen futuro por delante, o incluso de graduarse de la escuela secundaria. Si bien los resultados de la encuesta son bastante duros, una investigación de Polyvision y Steelcase Education brinda ejemplos alentadores para el futuro de la educación.
Las pizarras juegan un papel fundamental en las aulas de aprendizaje activo
Polyvision se asoció a Teach for India y Whitemark Limited, el distribuidor nacional de la compañía en India, para donar cientos de pizarras blancas e3 CeramicSteel y superficies para pizarrones de alta calidad a aulas con pocos recursos en siete ciudades: Mumbai, Delhi, Pune, Bangalore, Hyderabad, Chennai y Ahmedabad. Para medir los efectos positivos en la enseñanza y las capacidades de aprendizaje, Polyvision lanzó una encuesta para los docentes después de la instalación. Los resultados de la encuesta apuntan fuertemente a favor de la integración de pizarras de calidad en el aula.
- 97% de los docentes piensa que escribir en pizarras es una herramienta fundamental para incrementar el aprendizaje
- 90% de los docentes asegura que sus estudiantes se comunican mejor con las nuevas ayudas visuales
- 85% de los docentes piensa que sus estudiantes retienen mejor la información
- 81% de los docentes notó resultados de aprendizaje positivos
Patel, un docente en Mumbai, describe la importancia del aprendizaje visual en su aula. "En una clase, el hecho de que los estudiantes relacionen lo que dice el maestro con las palabras o imágenes de la pizarra es crucial para que comprendan el tema y mejoren el vocabulario. El aprendizaje visual es particularmente importante en las clases de la escuela primaria."
Además de que permiten mejorar la retención del aprendizaje visual, las pizarras son un componente fundamental en el diseño de las aulas de aprendizaje activo sin un "frente" determinado, lo cual implica que los estudiantes no deban sentarse en filas frente al pizarrón. Más bien, los estudiantes dirigen su atención a diferentes áreas según la actividad que deban desarrollar. Este movimiento basado en la actividad y las actividades en grupos pequeños ayudan a los estudiantes a entablar relaciones y permite que aquellos más introvertidos se abran y compartan sus ideas, en lugar de compartirlas frente a toda la clase.
Las pizarras blancas distribuidas por el aula brindan a los docentes y a los alumnos más opciones: pueden proyectar, escribir y colgar materiales con imanes. Las pizarras personales ofrecen a los estudiantes la posibilidad de capturar sus propios pensamientos e ideas durante la clase y compartirlos fácilmente con el instructor o con grupos pequeños de pares. Al emplear tanto el cuerpo como el cerebro en el proceso de aprendizaje, las pizarras blancas involucran a los estudiantes física y mentalmente mediante el acto de escribir o dibujar.
El caso de la movilidad
Los estudios post-ocupacionales de Steelcase Education muestran que las aulas intencionalmente diseñadas para un aprendizaje activo impactan favorablemente en el nivel de compromiso de los estudiantes. El movimiento físico incrementa la lucidez mental y es este movimiento físico en las aulas dedicadas al aprendizaje activo lo que, según el investigador de Steelcase Education Andrew Kim, ayuda a mantener a los estudiantes interesados en el aprendizaje. "Los investigadores de WorkSpace Futures notaron un mayor éxito para lograr la atención de los estudiantes al utilizar métodos de aprendizaje activo que involucren directamente a los estudiantes en el contenido del curso".
Otros investigadores coinciden. La importancia de la movilidad en el aula resulta cada vez mayor, con estudios que respaldan la noción de que el movimiento mejora el bienestar general de los estudiantes y su capacidad para mantener la atención en clase. Un artículo reciente publicado en el periódico Psychology Research and Behavior Management informa que la integración de actividades como el yoga y el mindfulness se asoció a una mejora significativa en la calidad de vida emocional y psicosocial de los estudiantes. Otro estudio publicado en Journal for Evidence Based Complementary Alternative Medicine reveló que luego de practicar 10 semanas de yoga en el aula, los estudiantes mostraron mejoras generales en sus interacciones sociales con compañeros de clase, el período de atención, el rendimiento académico, la capacidad para manejar el estrés y la ansiedad, además de incrementar su confianza y autoestima y mejorar el humor general.
Con el amoblamiento móvil, los cambios en el diseño de las aulas pensadas para el aprendizaje activo permiten una multiplicidad de modos de aprendizaje y enseñanza durante una clase. Los estudiantes pueden formar rápidamente grupos pequeños, acomodarse para debates en grupos más grandes o formar filas para escuchar exposiciones o rendir exámenes. Los docentes también pueden desplazarse por el aula para desempeñarse como instructores de los estudiantes de forma particular o en pequeños grupos. No es solo la movilidad de los estudiantes y los docentes en las aulas de aprendizaje activo que incrementa el nivel de compromiso; el intercambio de contenidos e ideas mantiene a los estudiantes alertas y los alienta a desarrollar habilidades sociales tales como la comunicación, la colaboración y el pensamiento creativo.
El aprendizaje activo está modificando la educación
La gran cantidad de beneficios del aprendizaje activo se sigue documentando. La integración del movimiento, las pizarras y una mentalidad de participación activa en el aula son componentes fundamentales para mejorar las oportunidades de éxito en los estudiantes. Estos elementos se combinan para incentivar la educación en un entorno que permite que el aprendizaje fluya a un ritmo natural e inculcar habilidades claves en los estudiantes. A medida que más cantidad de aulas se transformen para crear entornos de aprendizaje activo, la cantidad de estudiantes que se sienten involucrados en sus clases, entablan relaciones con sus pares y los docentes, y desarrollan la confianza en sus capacidades de aprendizaje, seguirá en aumento.